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domingo, 20 de mayo de 2012

The triumph, 2004. Urban Train of Puerto Rico, Bayamón Station /Public Art Program of Puerto Rico

ART WORK COMMISSION
Proyecto de Arte Público de Puerto Rico, Mural El Triunfo
ARTIST STORY: Behind-the -Art
La mágia del proceso

Proceso creativo de como se hizo en mural El Triunfo.



Me entrené en la técnica del mosaico con el maestro y artista Lucio Orsoni, en la fabrica Orsoni en Venecia. En esta fabrica se manufacturan mosaicos de forma artesanal con más de 200 años de tradición. Yo venía de hacer el Camino a Santiago (al norte de España) y lo había dejado todo, literalmete, por el camino. Cuando llegé a Venecia, solamente traía la ropa que llevaba puesta. No tenía ropa apropiada para la reunión con Lucio Orsoni (Presidente de Orsoni Factory) pues no hubo la oportunidad de ir de compras. Traía el dibujo del proyecto enrollado en mi mochila que llevé durante todo el camino. Cuando le enseñé el diseño al Maestro Orsoni se sorprendió y me dijo "¿y tu vas a construir este mural en mosaicos de 100 pies de largo? Pues sí, le contesté inocentemente. Después de unas horas que me conoció  y me enseñaba como se cortar un mosaico de cristal, me comento " si,  creo que lo vas a poder hacer...". 

Dibujos de taller. Vista en el Museo de Arte de Puerto Rico.

Conocí todo el procedimiento en la fabrica de cómo se hacen los cristales, los materiales y los instrumentos. Los hornos que se usan y la técnica, es muy similar a la que se usaba hacen dos siglos atrás, con algunas variantes, como la elaboración de los cristales con tecnología  contemporánea.

La fabrica de Orsoni es un negocio  familiar,
fundado en el 1800, donde laboran 50 trabajadores artesanos familiares y locales. 



Luego, cuando regresé con ese conocimiento a mi estudio en City Island, New York, entrené a 5 asistentes artistas y formé un equipo de trabajo. Para la realización del proyecto (El triunfo, 100 pies de largo por 9 pies de alto, Deportivo de Bayamón, Tren Urbano de Puerto Rico),  se incluyó a un equipo multidisciplinario en distintas facetas. La fabricación total de los mosaicos duró 9 meses; investigación, diseño, dibujos de taller, fabricación e instalación. Trabajamos entre 12 y 14
horas diarias y muchos fines de semanas. Para el transporte de los mosaicos a Puerto Rico se construyeron cajas especiales y se empacaron a modo de rompe cabezas. Se construyó una pared estructural de acero inoxidable en la estación del tren. La instalación se hizo In Situ, con el maestro albañil Fernando Descarte, quien hizo la instalación de los mosaicos. La técnica para la instalación de los mosaicos era muy distinta a la tradicional por la que se requería de un albañil con muchas destrezas, sensibilidad al mañas.  El resultado fue un esfuerzo de muchas personas que colaboraron de muchas maneras y en distintos momentos para lograr este único proyecto monumental que resultó de mucho aprendizaje, no solamente para mí sino para todos los que colaboraron. 



Detalle dibujos de taller




Detalles del mural El Triunfo


Dibujo de taller
 



 
Fábrica Orsoni Venecia, Italia ORSONI - Smalti Veneziani


      

    


Proceso de instalación

_________________________________________________________________________________Otros trabajos en mosaicos - comisión privada 

Ficha técnica

Título de la obra: Ninfas, Comisión, casa de la Lic. Mayra López Mulero
San Juan, Puerto Rico.
Año: 2005,
Medio: Mural de piso en mosaicos en cristal "smalti" bizantinos
y cemento blanco.
Medidas: 9 pies de largo x 6 pies ancho.














_________________________________________________________________________________
MURAL Puesta de Sol


Ficha técnica

Título de la obra: Puesta de Sol. Comisión.
San Juan, Puerto Rico
Año: 2005
Medio: Mural de pared en mosaicos en cristal "smalti" bizantinos (pared en patio de la casa Mulero).
Medidas: 4 pies de largo x 5 pies ancho.


DETALLE:









The Bronx Museum, Bronx, New York, Memorias del silencio, 1998.

COMMUNITY ART /The Bronx Museum art work commission
ARTIST STORY Behind-the-art

El proceso creativo interactivo, la atista y los participantes.


Instacion interactiva-reactiva en colaboración con el Elder Group, Bronx Museum, Bronx, NY
Memorias del silencio, 1998 es una instalación interactiva-reactiva,  arte comunitario, en colaboración con 15 residentes del Grupo de Envejecientes del New Settelement Apartments del Bronx que culminó en una serie de talleres de arte organizado por el Bronx Museum, Bronx, New York, EU.
En los años noventas, los museos de arte de la ciudad de New York consideraban que era necesario fomentar más sus programas educativos con la comunidad y buscaban nuevas formas de expresión artística. El Bronx Museum creó el programa Galería  Satélite donde invitaban a los artistas para crear puente de comunicación entre museo y comunidad. Estas iniciativas nos recuerda al El New Museum en el 1980, uno de los primeros museos en EU en crear programas de educación; cuando lanza el programa de arte en escuelas secundarias (HSAP), donde  participa el arte contemporáneo con estudiantes de alto riesgo. Así, los programas de educación de los museos, más que enfocarse en los visitantes como tal, lograron crear reflexiones más profundas sobre un verdadero programa con la comunidad. Actualmente, el arte en colaboración y comunitario son propuestas que lograron ubicarse en el arte de vanguardia y muy fundamental en los programas de educación de los museos en el mundo y el arte comunitario.

Metodo y estratégias de Anaida
  • Intuisión  
  • Franqueza 
  • Empatia
  • Imaginación
  • Todos somos artistas 
  • El trato


El proyecto proponía a los participantes comenzar a partir desde una historia personal de cada uno donde compartirían un secreto que jamás habían develado. A través de una serie de talleres los participantes trabajarían una "caja de los secretos" donde pintarían, construirían, pegarían artisticamente sus secretos, dirijidos por la artista. Esas cajas terminadas formarían parte un gavetero.

La primera vez que me reuní con el grupo no recibí muy buena respuesta, los sentí desconfiados, mal humorados e impacientes. Oí decir algunos de ellos " que secreto, ni que secreto voy a contar... les parecía una idea muy extraña hablar de secretos. El grupo era multicultural y tenían entre ellos problemas étnicos, de comunicación y estaban divididos. Para mi representaba un gran reto y motivo de preocupación, realmente no sabía como proceder para convencerlos y decidí hacer lo que siempre hacia en momentos como estos; confiar en mi intuición, ser franca, honesta y mostrar mi empatía hacia ellos. Para la próxima vez que los vi les propuse una idea: vamos a hacer un trato, yo les voy a contar dos secretos; uno que me contaron y otro mío. Así fue y el trato se hizo. Cuando terminé de contar mi secreto se levantaron a consolarme y decirme lo mucho que lo sentían. Comenzaron a contar sus historias, relatos muy variados, impresionante, algunos fantásticos y otros muy tristes. El grupo cambió de actitud, se rompieron las barreras culturales y étnicas, se crearon lazos de solidaridad y unión entre ellos, trabajaron muy intensamente con mucho entusiasmo. Memorias del silencio se expuso en el Discovery Museum en New Jersey, Hostos Gallery en el Bronx y también  en Museo de Arte de Puerto Rico. Verdaderamente se formó un grupo al que se sentían como artistas que llamé Emerging Elder Group. Los invité a un taller de arte en el New Museum of Contemporary Art, NYC, con motivo de mi exhibición Juegos Illegales.
*Raina Lamkins-Filder comenta: Por ser una artista que a menudo hace trabajos de colaboración con otros, Hernández tiene la facilidad de hacerse confiar las historias personales de relativos extraños en la manera que solo los más íntimos pueden lograrlo. Lejos de ser voyerista, Hernández, es como el vehículo por el medio del cual se representa lo innombrado, a la vez que le da forma a los impulsos creativos de los envejecientes. Animó a los participantes de Elder Group a que divulgaran sus historias usando medios mixtos, construcciones, collages, objetos encontrados, y artículos personales para crear gavetas muy individuales para un mueble diseñado por Hernández. La temática de Memorias del silencio toca el tema de la familia, el trabajo, la emigración, las relaciones y la supervivencia. Para ayudar a sus colaboradores a revelar recuerdos largamente silenciados, Hernández, comenzó este proyecto confesándoles su propia historia y sus secretos a los participantes envejecientes.

Cuando los espectadores se ven frente a la instalación se confrontan, antes que nada con su propio reflejo. Un gran espejo con un marco dorado intrincado cuelga sobre las gavetas negras y verdes. Los signos domésticos son familiares y recuerdan los muebles de los dormitorios de nuestras casa quizás, incluso con una fotografía familiar y figuritas de porcelana de recuerdo que descansan sobre manteles de encajes color crema.

.... Es raro que silenciemos experiencias del todo positivas. En Memorias del silencio, cada gaveta significa un momento en el tiempo, un amor perdido, un mal hecho. A menudo borramos malos recuerdos en un esfuerzo por calmar nuestra culpa, esconder nuestro dolor o simplemente para olvidar. Sin embargo, Hernández mantiene que la memoria " es la fuente de lo fantástico, sin límites ni fronteras. Su contenido es inagotable. Ahí está la clave y la llave para abrir el mundo infinito, desconocido y misterioso de la creatividad".  Esto no quiere decir que que el trabajo trata sobre la terapia. Más bien, reconoce cómo, por medio de un ejercicio de la memoria, se puede desatar la verdadera creatividad.

Ficha técnica
Titulo de la obra: Memorias del Silencio, 2008
Madera, acrílico, objetos, espejo, fotografías.
Dimención variable: Cada gavetero 4.4 x 2.9 pies x 10.5 pulgadas. Espejo 22 x 30 pulgadas. Piso linoleo 12 x 4 pies.
* Fragmento del ensayo por Raina Lampkins-Filder, Compartiendo secretos: las instalaciones de Anaida Hernández 1994-2000, del catálago  Anaida Hernández, Riddle me This, What Am I? Pag. 48-49, 2001, publicado por Hostos Art Galery, Bronx, NY. Disponible en Amazon.com



miércoles, 2 de mayo de 2012

Lower East Side Tenement Museum, New York City, Secretos Compartidos, 1999

ART WOK COMMISSION
ARTIST -IN- RESIDENCE
Instalación interactiva-reactiva en colaboración con 25 inmigrantes de New York City. Coordinado por el Lower East Side Tenement Museum.
40 cajas en madera, acrílico, cremalleras, campanas, clavos, papel, objetos, linterna, tela negra.
Medidas variables: Cada cajas 14 x 13 pies x 3 pulgadas. Vista en el Museo de Arte de Puerto Rico.



Enlace: Tenement Museum New York City - NYC Museum


En  1999 Anaida Hernández, fue invitada como artista residente a crear una obra en el Lower East Side Tenement Museum, New York City. Este museo, situado en el barrio judio al este de NYC, es  un museo dedicado a preservar la historia de las familias de los inmigrantes que han vivido allí desde hacen 150 años.

Secretos compartidos,  es una instalación  de pinturas y objetos creadas en colaboración con inmigrantes de numerosos países  que incluyen China, Italia Brasil, Colombia, India, Italia, México, y la Republica Dominicana. Los participantes, residentes de NYC, eran miembros del programa Englih for Students of Other Langueges, de University Settlement House.

Entre las muchas instalaciones de Hernández, Secretos Compartidos, es la más conforme a la estética esperada del arte conceptual. El espectador entra a un espacio blanco y se encuentra rodeado de 40 cajas cuadradas montadas en la pared a aproximadamente a 5 pies del piso, las cajas cuadradas y huecas cubiertas de una tela negra clavada a los lados con clavos de construcción y tiene una cremallera que divide la tela por el medio. En la superficie hay poco detalle visible, lo cual intensifica la naturaleza secreta del espacio interior. La atmósfera de descubrimiento es realzada por las linternas que le dan al visitante al entrar a la exposición.

Aquí, como en otras instalaciones de Hernández la función del cuerpo y la participación activa del espectador son componentes necesarios que en realidad completan la obra. Se invita al espectador a abrir la cremallera de la tela negra y tirante que cubre las cajas, y a mirar su interior. El propósito de las cremalleras es tanto funcional como metafórico; dan acceso solo si el espectador decide participar. Como este tiene que estirar el material para separarlo con una mano mientras manipula la linterna con la otra, las imágenes pintadas dentro de las cajas se oscurecen parcialmente y entran y salen de foco, como si batallaran para encubrir el secreto que guardan.

Las historias secretas escondidas detrás de la tela negra dan cuenta de los viajes, llegadas. Y sueños de aquellos que transplantados a los Estados Unidos. Ojos letras, números, signos interrogativos y otras imágenes de colores brillantes, pintados bien sea por Hernández, o por los participantes, relatan las vicisitudes  y triunfos de los inmigrantes en este país.

Como Hernández, que recientemente se mudó a New York, desde Puerto Rico, sus colaboradores, que luchan por aprender Inglés, hallaron comunicación por medio de la creación de símbolos de su propia experiencia.

De los muchos trabajo de la artista, tanto individual como de colaboración, mucha de las cajas contiene símbolos enigmáticos al parecer inescrutables que no dependen de la palabra para revelar sus sentidos. No obstante, si nos concentramos en estos lenguajes visuales personales los vemos desde la óptica desde sus propias historias, nos es imposible permanecer distantes según empezamos a hacer la cartografía de distintas rutas de la travesía del inmigrante.

Auque la colaboración con la comunidad que no tienen experiencia previa con las Bellas Artes anima y eleva el desarrollo estético de los participantes, es importante notar que la propia sensibilidad artística de Hernández está siempre inconfundiblemente presente. Tiene éxito como la forjadora de un proyecto estético en el cual todas las visiones salen a la superficie. 

Las instalaciones de Hernández son reveladoras, la artista coreografía ambientes sociales y estéticos sobre temas filosóficos, políticos, sexuales artísticos, quedan manifiestos para nuestra exploración y entendimiento. Su imaginería pictográfica es la llave para descifrar lo innombrado y lo interior para que finalmente podamos compartir nuestros secretos*


Raina A. Lampkins-Fielder

Curadora independiente, fue Directora del Programa Educativo de Whitney Museum of American Art y actualmente es editora de la revista Some/Thing
Vive y trabaja en Paris, Francia.

* Fragmento del ensayo Compartiendo secretos: las instalaciones de Anaida Hernández 1994-2000, del catálago  Anaida Hernández Riddle me This, What Am I? Pag. 48-49, 2001.


lunes, 19 de marzo de 2012

Until death do us part, )1992). 10 years traveling installation history from 1994 to 2004

Memorial dedicated to the deaths of 100 women murdered in Puerto Rico for domestic violence between 1990 to 1993.

VIDEO - click     

   


Traveling history exhibition: 

5 countries in North and Central America, Europe and the Carbe
7 cities
9 museums and galleries in the world
1 ton of weight. 
























Currently on exhibition as part of the permanent collection of the Museum of Art of Puerto Rico (MAPR).

Exhibition in museums and art galleries: 

Museo de Bellas Artes, Habana, Cuba; Ludwig Forum Museum, Aachen, Germany; Museo de Arte de Puerto Rico, San Juan, Puerto Rico; Museo de Arte y Diseño, San José, Costa Rica; Lehman College Art Gallery, Bronx, NY; Hostos Art Gallery, CUNY, Bronx, NY; John Jay Art Hall Gallery, New York City; Capitolio de Puerto Rico, San Juan, Puerto Rico; Raíces Art Gallery, San Juan, Puerto Rico.

Description

Artist: Anaida Hernández
Installation of 100 painting wooden box 14 x 14 each
Overall 7 feet (tall) x 22 feet (long); black color wall 10 feet high x 50 feet long; on floor, wood panels black color background painted, 6 feet x 32 feet x 3 inches 
At the base of the installation: written calligraph names with ages and death of 100 woman killed by domestic violence between 1990 and 1993  day of murdered womenin Puerto Rico.    

Curators: 

Suasan Hoehzel, Lehman College Art Gallery, Bronx, NY
Raina Lampkins - Filder, Hostos Community College Art Gallery, CUNY, Bronx, NY
Lliliam Llanes, V Bienal de la Habana, Museo de Bellas Artes, La Habana, Cuba
Museo Ludwig Forum, Aachen, Alemania
Viginia Pérez - Ratton, Museo Museo de Arte y Diseño Contemporáneo de Costa Rica
Mercedes Trelles, Museo de Arte de Puerto Rico.

Education programs:

Programa de educación en el Museo de Arte de Puerto Rico que incluyó las siguientes actividades alrededor de la exhibición Hasta que la muerte nos separe, 1994:
  • Doris Sommer, profesora de Lenguas Romances, Universidad de Harvard, Anaida Hernández, El artista como agente cultural.
  • Conversatorio con la artista: La violencia doméstica y las prácticas del arte contemporáneo, Museo de Arte de Puerto Rico
  • Talleres interactivos y reactivos con estudiantes en museos y escuelas. 
Referencias
  • Ensayo por Emilia Quiñones Otal
  • Ensayo por Raina Lampkin-Fider, Catálogo de la exposición Ridle me this what I'am, 2000, Amazon.com
  • Ensayo por Margarita Fernández. presentación catálogo Hasta que la muerte nos separe, 1994.
  • Reseña por Enríquez García Gutierez, Periódico Nuevo Días, 1994.
  • Reseña por Dra. Mercedes Trelles, Periódico El Nuevo Días 2004
  • Entrevista Susan Hoehzel
  • Ensayo Williams Zimmer
Link web page: 
  • Lehman Gallery, Bronx, New York: 
https://lehmangallery.org/anaida-hernandez-hasta-que-la-muerte-nos-separe-till-death-do-us-part/

  • New York Times    New York Times Articles








Enlace a reseña en el New York Times por William ZimmeART; One Show Ponders a Cause and the Other Reviews a Heritage - New York Times

ART; One Show Ponders a Cause and the Other Reviews a Heritage

By WILLIAM ZIMMERfg`bg
Published: April 19, 1998

THE Lehman College Art Gallery is divided into neat halves, and for the current exhibition the separation is specifically useful. Each half contains an elaborate installation, which is markedly different in temperament and rhythm from the other. ''Till Death Do Us Part'' by Anaida Hernandez is fraught with urgency, while ''A Town Portrait'' by Maria Magdalena Campos-Pons is a remembrance of things past.
Ms. Hernandez, who is from Puerto Rico, was moved to make her work by threatened changes to a 1990 law in her country, which made domestic violence a crime. In an interview with the gallery director, Susan Hoeltzel, Ms. Hernandez said many politicians had been accused under the law. With the help of a journalist who gained access to police records, Ms. Hernandez found the names, ages and dates of death of 100 women killed by their husbands between 1990 and 1993. These facts are handwritten in a florid script at the base of the installation.
The main part of the work is a large grid with basically a horizontal orientation. It is composed of shallow boxes standing upright, which are modeled after those ubiquitous boxes containing flowers or other mementoes from mourners in cemeteries in San Juan where burial is above ground. But Ms. Hernandez has instead painted on the bottom of each black box brightly colored imagery that addresses the fragmentation caused by domestic violence.
One saying declares that sometimes a public sacrifice is necessary. The families of some victims were reluctant to have a case made public, but Ms. Hernandez, who showed the work first in a public building in San Juan, felt that such a blatant illustration was the only way to preserve the domestic violence law.
Art created to serve a political cause often emphasizes rhetoric over any quality that can emotionally affect the viewer. Ms. Hernandez makes sure her installation has a subtle and lasting impact by making her symbols and their execution lively enough to keep the viewer's eye moving around the work to let the artist's intentions sink in. She seems to have a playful bent, which leavens her harsh messages: an ancillary piece, ''Crucigrama,'' is an outsize crossword puzzle having roughly the same format as the major work. The letters in the squares, each made by hand and having an original twist, form intersecting Spanish words that refer to domestic violence. In a glass case is a large book of stories, which Ms. Hernandez illustrated. The stories are about relationships between the sexes and are sometimes bawdy. It is reassuring to discover that this artist on a mission can see beyond the wreckage.



Documental El Tiempo... Premio Pitirre, Mejor documental Nacional 2005, San Juan Cinemafest. San Juan, Puerto Rico. Sobre la memoria del cine en Puerto Rico en los años 50. VIDEO (segmento)

Dirección y producción por Anaida Hernández. Premio Pitirre por mejor documental nacional, San Juan Cinema Fest, 2005.

Seducción,  2001acrílico sobre lienzo.

REVIEW by El Nuevo Día newspaper
VIDEO                                 

“El tiempo: memoria del silencio” es un documental basado en las películas producidas en Puerto Rico en la década de 1950 por la División de Educación de la Comunidad (DIVEDCO). De las más de 112 películas producidas por la DIVEDCO fueron seleccionadas para este proyecto cinco películas para reflexionar de manera innovadora sobre los cambios y transformaciones de Puerto Rico durante los últimos 50 años.Documental
El tiempo (2005)
Dirección y producción por Anaida Hernández 
Producción Magdalena Sagardía
Duración 25 minutos 
Premio Pitirre por Mejor Documental Nacional, 
San Juan Cinema Fest 2005, San Juan, Puerto Rico.







                              Segmento del documental El Tiempo
Premio Pitirre Mejor documental Nacional 2005. San Juan Cinema Fest, San Juan, Puerto Rico.

Enlace: Fundación Nacional para la Cultura Popular :: San Juan, Puerto Rico


El Instituto de Cultura Puertorriqueña y el Archivo General de Puerto Rico presentarán el martes 27 de septiembre de 2005 a las 7:30 de la noche, el documental “El Tiempo: Memoria del Silencio” de Añadía Hernández, en el Teatro Francisco Arriví localizado en la Avenida Ponce de León, esquina calle del Parque en Santurce. Puerto Rico.

Este documental que representa “Una mirada en dos tiempos” se presentará en conmemoración del cincuentenario del Instituto de Cultura Puertorriqueña y del Archivo General de Puerto Rico.

El documental de 25 minutos de duración combina la visita y revisión del paisaje del Puerto Rico de antes y el de ahora con la voz y la memoria de los “actores naturales” del pasado y con la participación de miembros de cada comunidad en donde fueron filmadas las películas originales. Cuenta además con música original, animación digital, efectos especiales, tomas aéreas y combina el pietaje de las películas originales con pietaje actual.

Asimismo, “El tiempo: memoria del silencio” fue filmado en las mismas comunidades donde fueron filmadas las películas originales: Las Croabas, Vieques en el Aire, Maternillo y Mansión del Sapo en Fajardo; Barrio Botijas II en Orocovis; Barrio Sta. Olaya en Bayamón y en el Barrio Cielito en Comerío.

Las películas de la DIVEDCO seleccionadas para este proyecto son: “Desde las nubes”, “El yugo”, “El puente”, “Ignacio” y la galardonada “Los peloteros”.

Valiosa aportación de Anadía Hernández-

“El tiempo: memoria del silencio” fue dirigido por la artista puertorriqueña Anaida Hernández quien es también la productora ejecutiva del proyecto. Hernández es conocida por sus esculturas, pinturas, grabados, videos y proyectos comunitarios y de arte público y por la utilización de imágenes cotidianas que combinan lo intelectual y afectivo para hacer el arte más accesible, activo y democrático.

La artista combina estos elementos para añadirle un interesante giro a esta reflexión del presente y del pasado de Puerto Rico. Anaida Hernández es además la Productora Ejecutiva y Directora del programa “Dos minutos-NY”, nominado por Programa Documental y Dirección en los Emmy Suncoast Awards (2003) que se transmite en Puerto Rico por TuTV-Canal 6.

La producción general e investigación de “El tiempo: memoria del silencio” estuvo a cargo de la profesora Magdalena Sagardía quien, entre otros proyectos académicos y educativos, fungió como productora e investigadora en la producción de “Dos minutos-NY”. La edición estuvo a cargo de Mariem Pérez. La cámara estuvo a cargo de Mariem Pérez, Carlitos Ruiz y Oscar Guerrero. El proyecto contiene música original compuesta por Daniel Belardinelli, Chamán y Welmo Romero. La animación digital y los efectos especiales estuvieron a cargo de José Cotté y Rojo Chiringa.

“El tiempo: memoria del silencio” es un documento que sensibiliza e informa al espectador contemporáneo sobre los esfuerzos de generaciones anteriores de puertorriqueños para lograr, por medio de la autogestión y el cooperativismo, consolidar sus comunidades y resolver problemas de índole social. Es además un documento de gran importancia cultural y educativa para generaciones venideras de puertorriqueños y para todos aquellos interesados en los estudios sobre Puerto Rico, el Caribe y América Latina.

La DIVEDCO a través del tiempo-

Don Ulpiano Mulero Rivera, protagonista de la película “Ignacio”, es entrevistado en el documental.
(Foto suministrada)
Las películas de la División de Educación de la Comunidad representan la edad dorada del cine puertorriqueño y para los esfuerzos actuales de crear una industria cinematográfica productiva en Puerto Rico son de obligatoria consideración. Este documental además conversa con importante centralidad con los estudios académicos que giran en torno a temas de cooperativismo, educación, lengua, identidad, antropología, memoria colectiva, cambios culturales y proyectos nacionales entre otros y contribuye con los estudios sobre el cine en Puerto Rico con la inclusión de las voces de los “actores naturales” que fue una de las más importantes contribuciones de la DivEdCo.

Tras su fundación en 1949 bajo la Ley #379, la División de Educación de la Comunidad (DivEdCo) representó uno de los proyectos culturales y comunitarios más innovadores y dinámicos del Caribe y América Latina. Durante los años que siguieron a su fundación se filmaron más de 112 películas de largo y cortometraje en comunidades rurales de Puerto Rico y la mayoría de los participantes de estas películas eran “actores naturales” de la propia comunidad. Muchas de estas películas recibieron importantes premios y reconocimientos internacionales.

Los entrevistados en el documental “El tiempo: memoria del silencio” son en orden de aparición: de Fajardo: Roberto Hernández, Don Amado Hernández (participante en la película “El yugo”) y Lillian Robles (participante en la película “El yugo”); de Orocovis: Doña Matilde Colón Colón (participante de la película “El puente”); de Bayamón: Don Ulpiano Mulero Rivera (protagonista de la película “Ignacio”) y Doña Benny Vega; y, de Comerío: Don José Manuel Matos Berríos, Don Celso Alvarado y Don Luis Raúl Morales (protagonistas en la película “Los peloteros”).

Doña Matilde Colón Colón, participante en la película “El puente”, filmado en Orocovis.

Las películas de la División de Educación de la Comunidad (DivEdCo) son, por su importante contribución a las artes, a la educación y a la organización comunitaria en el Caribe y América Latina, patrimonio nacional de Puerto Rico. El custodio de este importante valuarte es el Archivo General de Puerto Rico del Instituto de Cultura Puertorriqueña. Esta colección de películas de la División de Educación de la Comunidad que se encuentra en el Archivo de Imágenes en Movimiento (AIM) que forma parte del patrimonio nacional de Puerto Rico y es un proyecto que se llevó a cabo con la colaboración del Programa de Comunidades Especiales del Estado Libre Asociado de Puerto Rico a través de Expres-Arte a Todo Rincón del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP).

Don Ulpiano Mulero Rivera protagonista de la película “Ignacio”, 
filmado en Santa Holaya en Bayamón.

Disponible en el Archivo General de Puerto Rico / Puerta de Tierra, San Juan, Puerto Rico
787 724-2680

23/sep/05

jueves, 15 de marzo de 2012

Museo de las Américas, Viejo San Juan, Puerto Rico / Peticiones, imagina tu realidad,1998. Instalación de piso, 100 siluetas de manos. - 2010.


Detalle Peticiones - mural-, 2012. 

Museo de Las America, San Juan, Puerto Rico


VIDEO
ART, SCIENCE and BRAIN
TWO REVIEW by Laura Bravo and Milly Gill                                                                                                              

ARTIST STATMENT 
Investigaciones científicas resientes han demostrado la relación intima que existe entre la imaginación y la realidad. Experimentos realizados por neurocientíficos nos informan, a través de imágenes de resonancia electromagnética, que cuando un individuo observa determinado objeto aparece actividad cerebral, pero cuando el mismo sujeto cierra los ojos y lo imagina, la actividad cerebral es la misma. Concluyen que el cerebro no hace diferencia entre lo que ve y lo que imagina porque las mismas redes neuronales están implicadas; para el cerebro es tan real lo que ve como lo que imagina y siente. En Peticiones , imagina tu realidad, es una instalación transdisciplinaria, donde  exploro los conceptos de  imaginación versus  realidad.

Peticiones es una instalación In Situ”, interactiva que consta de 100 siluetas de manos en madera pintadas con símbolos cotidianos de la vida diaria.  Las manos en el piso, en su conjunto, forman  símbolos laberíntico que a su vez forman espirales que representan  la vida misma.

Imagina, visualiza y materializa tu realidad

El observador se convierte en actor-participante al interactuar con la instalación e imaginar con PASIÓN sus deseos y escribirlas. La voluntad del actor–participante, el cual actúa  como protagonista, aporta con sus vivencias al escribir sus deseos. Una vez escrito sus deseos, debe visualizarlas con vehemencia y colocarlas entre los dedos de las manos escultóricas. Estos deseos se convierten en realidad partiendo de la premisa, que todos somos creadores de nuestra realidad según afirman teorías científicas contemporáneas. Todo lo que vemos a nuestro alrededor alguna vez fue imaginado .

Advertencia:
Cuidado con lo que imagines y escribas porque, lo que pidas, será materializado.

* Arte Conceptual Afectivo es un termino que propongo para describir mis obras de arte.  “Es un arte que es conceptual en su idea, en su secuencia y estructura, pero que incluye con contundente centralidad la imagen de afecto con el símbolo y que rompe con lo puramente intelectual del concepto y abre el espacio para combinar el intelecto con lo emotivo. Esto lo convierte en más accesible, más incluyente, más activo y democrático. Es una obra conceptual en la idea y afectivo en el símbolo” .Recogido de Entrevista a Anaida Hernández  por Gianina Braschi, Catálogo de la exposición Riddle Me This, What Am I?, Hostos Art Gallery, Hostos Community College, CUNY, Bronx, NY, 2001. Disponible en Amazon.com
Peticiones, imagina tu realidad, es una instalación                                


que se exhibió, dentro del contexto de la colectiva Mayagüez, un siglo de artistas, 
desde el miércoles 15 de marzo hasta el 15 de junio de 2012 en el Museo de las Américas, 
Viejo San Juan, Puerto Rico.

Ficha técnica
Artista: Anaida Hernández
Título: Peticiones: imagina tu realidad
Medio:  Instalación de arte, pintura, madera, objetos, collage, tierra, cinta adhesiva fosforecente.
Medidas variables: En el piso formas en espiral laberínticas 17 x 38 f, manos entre 5 x 6 x 1 " y 14" (alto). 
Palabras claves: *Arte Conceptual Afectivo, mente, investigaciones neurocientíficas, imaginación, realidad, deseos.
Año: 1997 – 2012


Anaida Hernández: peticiones de manos

por Laura Bravo

El concepto clásico de artista no le hace justicia al ejercicio profesional que lleva desarrollando Anaida Hérnandez desde hace más de treinta años. Tras una sólida formación en pintura y en grabado, dos medios de profunda raigambre en la plástica puertorriqueña, expande su horizonte artístico a otras disciplinas pero con una firme recurrencia hacia la instalación, término que, a su vez, tampoco goza de suficiente amplitud como para catalogar el talante de la apropiación que Hernández efectúa de las salas de los museos o del espacio público donde exhibe. 

El proceso creativo con el que genera sus obras hace también de esta mayagüezana una artista que se resiste a clasificaciones al uso (entrevista a Hernández en Soto 38). Lejos del añoso encierro en el taller y de la legendaria concentración solitaria practicada por los creadores plásticos, como entes aislados de las circunstancias del entorno que les rodea, Anaida Hernández ausculta, a través de un juicio serio e insistente, las vicisitudes políticas y sociales del mundo en el que vive. Esta línea de trabajo, que se concentra en la investigación de la sociedad contemporánea a través de cuestiones de género, migratorias, políticas, legislativas, psicológicas y también científicas, la ha convertido en una asidua invitada tanto en prestigiosos programas y residencias universitarias a lo largo de Estados Unidos y Puerto Rico como en comunidades desfavorecidas y de escasos recursos, donde ha sembrado magisterio y ha generado productivos debates a través de la creación plástica.


Precisamente fruto de una residencia de investigación artística nace el germen de las Peticiones con las que Anaida Hernández está presente en Mayagüez: un siglo de artistas. Las más de un centenar de siluetas de manos en madera policromada, que recogen entre sus dedos otros tantos ruegos colectivos, trazan aquí un puente entre la iconografía personal de la artista, en cuya producción éstas han jugado siempre un papel determinante, y su ancestral presencia en la historia de la expresión plástica, cargadas de una intensa simbología. La hilera de manos y antebrazos que la creadora mayagüezana dispone en el espacio expositivo es heredera de la abigarrada composición visual y del carácter mágico de aquellas que fueron pintadas sobre las rocas de la Cueva de las Manos, en la provincia argentina de Santa Cruz, hace más de nueve mil años. A pesar de que su significado es aún hoy un enigma, las manos de Anaida Hernández comparten con aquellas arcaicas huellas un misterioso halo de atracción mística y una proyección espiritual en la formulación de un deseo, ya sea a través de la plasmación física de la mano humana como símbolo de unión o posesión del objeto deseado, o en su caso a través de los cientos de papeles que así lo manifiestan en Peticiones por medio de su enunciación escrita. Estos rollos de papel, en los que el público tiene la oportunidad de responder a la invitación de la artista para plasmar una petición particular por medio de palabras, tienden nuevamente un nexo con las tradiciones de otras culturas ancestrales, al margen aquí de lazos religiosos, como sucede con la introducción de deseos y plegarias en las grietas del Muro de las Lamentaciones, en Jerusalén. El muro se transforma en sendero curvilíneo en la instalación de Hernández y los espectadores encajan sus peticiones entre los dedos de las manos multiplicadas, metafóricamente sembradas en una tierra fértil de la que, con el riego de la esperanza y la expectativa de su cumplimiento, brotará la materialización del deseo.

Sin embargo, Peticiones no solo plantea conexiones con creencias místicas y religiosas, como también se han establecido con la tradición católica de los exvotos (Tió 8). La misma artista ha marcado otras pautas interpretativas para sus recientes obras, especialmente enfocadas en sus investigaciones sobre la psicología y la neurología, como es el caso del principio jungiano de la sincronicidad, que señala una conexión entre los deseos del ser humano y fenómenos de la realidad que parecen, aunque sea casualmente, confirmarlos (Hernández). En la línea de este planteamiento, su instalación propone una invitación colectiva a la participación del público en la formulación de sus deseos, pero también a poner en marcha el ejercicio, a través del arte, del funcionamiento de la mente y de su conexión con el universo (Hernández en Rodríguez 28). Como la misma creadora lo expresa, cada mano representa un deseo, el cual existe porque puede pensarse y visualizarse (Hernández en Toro).

Los espectadores se adentran en esta y en otras de las obras de Hernández tomando parte en un rito del que tienen que descubrir las instrucciones. El acto tradicional de observar se transforma en la práctica de una ceremonia, en un proceso heredero de la propuesta de Marcel Duchamp sobre la contribución del espectador al acto creativo del objeto artístico, en la necesidad de descifrar su significado en el contexto de la realidad a la cual éste pertenece. Los proyectos de Anaida Hernández, como sucedía en sus reconocidos Juegos Ilegales (1998), se convierten en espacios abiertos a una interacción dinámica a través de estrategias como el juego y el humor, que tienen como propósito el desciframiento de los símbolos que los componen para que el espectador pueda reconocer e interpretar la realidad que le rodea, empleando usualmente las claves del mismo contexto en el que vive (Hernández en Braschi 21). La interpretación de los símbolos (lingüísticos, matemáticos, psicológicos y culturales) se convierte en un acto colectivo, en un juego de tintes semióticos, tal y como sucede con los gestos de las manos de Peticiones, las posturas de sus dedos y sus múltiples representaciones figurativas, de diseños simples pero de enigmáticas referencias, que hacen de cada una de las piezas un ejemplar único. Nos encontramos, además, ante una instalación que confirma la importancia del recurso de las manos en la iconografía de la artista, presentes en producciones pretéritas como La verdad y nada más que la verdad, El triunfo, Estrategia de conjuntos o Las manos de Caíta (ver Barreras).

Cuenta Anaida Hernández que las manos de sus Peticiones retoman el recuerdo de un episodio de su vida en el que conoce a Caíta, una consejera que practicaba la quiromancia y la materialización de los deseos y plegarias de aquellos que solicitaban sus servicios. Años más tarde, acabando de llegar a la costa de la Gran Manzana, en 1988, la artista mayagüezana formularía un deseo: exhibir su obra en el New Museum of Contemporary Art, reconocido internacionalmente por su curaduría en proyectos artísticos experimentales (Ramírez 9). Pocos meses después, Hernández se convertía en la primera puertorriqueña en formar parte de la agenda del prestigioso centro, formalizando uno de los tantos logros de esta mayagüezana que convierte en éxito todo lo que pide con sus manos.

Fuentes citadas:

- Barreras del Río, Petra. ¿Qué se trae entre manos Anaida Hernández?” Anaida Hernández: Fórmula secreta. San Juan: Galería La Pintadera, 22 de noviembre - 28 de diciembre de 2002.
- Braschi. Giannina. Interview with Anaida Hernández.” Anaida Hernández. Riddle Me This, What I am? New York: Hostos Community College Advisory Council, 2001. 20-21.
- Hernández, Anaida. “Yo me pronuncio maya = ilusión.” Maya. Trucos, engaños y trampas. Mayagüez: Museo Eugenio María de Hostos, Departamento de Arte y Cultura del Municipio de Mayagüez, 18 de septiembre - 10 de diciembre de 2007.
- Rodríguez, Jorge: “Museo Caribbean University. Sentidos y engaños de Anaida Hernández. El Vocero. 21 de agosto de 2010: 28-29.
- Soto Torres, Edgardo. “Una artista más allá de formas y estilos”. Diálogo, agosto de 2000: 38.  
- Tió, Teresa. “Anaida Hernández. Sentidos y engaños.” Anaida Hernández. Sentidos y engaños. Bayamón: Museo de Arte de Caribbean University, 25 de agosto - 25 de octubre de 2010: 4-9.
- Toro, Ana Teresa. Imaginar la realidad.” El Nuevo Día. 25 de agosto de 2010.
- Ramírez, Mercedes T. H. “Instalando la identidad: los juegos ilegales de Anaida Hernández.” Revista Domingo. El Nuevo Día, 28 de marzo de 1999: 9-11.




El arte conceptual afectivo de Anaida Hernández en Mayagüez: un siglo de artistas
POR Milly Gill
por Milly Gill.
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El arte conceptual afectivo de Anaida Hernández en MayagüezLa artista mayagüezana Anaida Hernández ha hecho una invitación personal para la exhibición Mayagüez: un siglo de artistas, que se inaugura el próximo jueves 15 de marzo en el Museo de las Américas en San Juan, en la que se incluye una propuesta suya: Peticiones, imagina tu realidad, una instalación transdisciplinaria, donde se enfrentan los conceptos de imaginación y realidad.
“Peticiones es una instalación In Situ, interactiva que consta de 100 siluetas de manos en madera pintadas con símbolos cotidianos de la vida diaria. Las manos en el piso, en su conjunto, forman símbolos laberínticos que a su vez forman espirales que representan la vida misma”, dice Hernández sobre su obra.
La mayagüezana cita investigaciones recientes que, según dice, han demostrado la “íntima relación que existe entre la imaginación y la realidad”. “Experimentos realizados por neurocientíficos han demostrado, a través de imágenes de resonancia electromagnética, que cuando un individuo observa determinado objeto aparece actividad cerebral, pero cuando el mismo sujeto cierra los ojos y lo imagina, la actividad cerebral es la misma”.
“Concluyen que el cerebro no hace diferencia entre lo que ve y lo que imagina porque las mismas redes neuronales están implicadas; para el cerebro es tan real lo que ve como lo que imagina y siente”, hemos citado.
Hernández invita al observador a convertirse en actor-participante e imaginar con pasión sus deseos y escribirlos. “La voluntad del actor-participante, el cual actúa como protagonista, aporta con sus vivencias al escribir sus deseos. Una vez escrito sus deseos, debe visualizarlas con vehemencia y colocarlas entre los dedos de las manos escultóricas. Estos deseos se convierten en realidad partiendo de la premisa, que todos somos creadores de nuestra realidad según afirman teorías científicas contemporáneas. Todo lo que vemos a nuestro alrededor alguna vez fue imaginado”.
El arte conceptual afectivo de Anaida Hernández en MayagüezMayagüez: un siglo de artistas, nace con el propósito de exponer la categoría de creadores que han resultado clave en el desarrollo de las artes plásticas de Puerto Rico y cuyo nombre y producción han estado, y están, directamente relacionados con este municipio del oeste borinqueño.
Hernández nació en Mayagüez, y mantuvo hasta hace poco su residencia y su taller de trabajo en Nueva York. Estudió su bachillerato en el CAAM y una maestría en grabado en la Escuela San Carlos de la Universidad Autónoma de México. Hernández es conocida por su trabajo en distintos medios: grabado, escultura, vídeo, instalaciones y sus obras de arte público donde explora temas como violencia doméstica, migración, seducción, el poder y los derechos humanos.
Su lenguaje artístico deriva de objetos cotidianos que discurren de lo intelectual a lo emocional. Ejemplo de ello es su instalación, Hasta que la muerte nos separe, una obra itinerante que denuncia la violencia doméstica de la que fueron víctimas unas cien mujeres puertorriqueñas en la década del 90. Dirigió y produjo la serie Dos minutos NY, 39 cápsulas de dos minutos acerca de la contribución de los latinos y puertorriqueños en los Estados Unidos. La misma se transmite por PRTV.
La también profesora ha acuñado el término arte conceptual afectivo para describir su obra que explora el intelecto y lo emocional.
“Es un arte que es conceptual en su idea, en su secuencia y estructura, pero que incluye con contundente centralidad la imagen de afecto con el símbolo y que rompe con lo puramente intelectual del concepto y abre el espacio para combinar el intelecto con lo emotivo. Esto lo convierte en más accesible, más incluyente, más activo y democrático. Es una obra conceptual en la idea y afectivo en el símbolo”, así la cita Giannina Braschi en una entrevista para, el catálogo de la exposición Riddle Me This, What Am I? de la galería de arte Hostos en el Hostos Community College, CUNY de Nueva York.
Advertencia:
“Cuidado con lo que imagines y escribas porque lo que pidas, será materializado”, concluye Hernández.